elrefugioalpino

ADIOS AL INVIERNO Y A LAS NIEVES DE PRIMAVERA.

LA NUEVA NORMALIDAD...

Nos encerramos pensando que un día no muy lejano volveríamos a calzarnos las botas y los esquís, las botas y los crampones... no guardamos ni los piolets, ni las mochilas, ni las chaquetas de invierno y mucho menos la ilusión de regresar a nuestras montañas nevadas. Porque así las dejamos, nevadas, con hielo, con frío, con el aspecto inhóspito que les da el invierno, con  los árboles de hoja caduca totalmente desnudos; esperando en nuestra reclusión que el lento pasar de los días no se llevara ese manto blanco que nos enloquece y que tantos proyectos placebos genera en nuestros pensamientos y vidas.

De viaje al Espelunciecha, El Anayet  y Canal Roya aparecían de entre las nuves...

Norte del Midi...ambiente invernal...

El Cerrez en primer plano, Barranco de Torozuelo y vigilantes detrás Garmo Negro, Algas y Argualas.

Sierra Tendeñera con sus nortes: Peña Roya, Peña Blanca, Sabocos y el Valle de la Ripera con sus escarpadas paredes donde se juega al puro alpinismo pirenaico.

Los días han pasado y ese pasado que queríamos congelar se ha convertido en primavera. Una  primavera que nos traía ilusiones, aunque el presente, convertido en una losa irreal, nos las iba despedazando... día a día hasta el ahora mismo...

Descenso al Valle del Ara con el inmenso Macizo del Vigemale detrás.

Vuelta al Midi... SOLEDAD...

Pensamientos de libertad... deslizándose por las laderas de Yenefrito...

Foratata y El Valle de Tena

Por encima del agua helada en el Ibón de Bramatuero, con El Serrato de fondo...

Sierra de Javalambre...espectacular el Barranco de La   Bellena

Pendientes a la cima del Culibillas...

La frustración se convirtió en resignación y la resignación en resiliencia como única forma de vencer el miedo, el hastío, la impotencia de no poder hacer nada ante lo que estamos viviendo...nada o muy poco, excepto quedarnos en casa viendo pasar los días y las tardes y las noches; nada excepto quienes lo están dando todo, incluso sus vidas...nunca tendremos suficientes aplausos, ni palabras para agradecérselo...

Sonreímos cuando somos felices...

...felices de estar donde estamos...

...con quien queremos estar...

...sintiendo la libertad de las cimas...

...que tanto deseamos...

y sin darnos cuenta, este cuento de terror nos hizo olvidar por momentos una de nuestras necesidades primarias: LA MONTAÑA...

El sonido de la nieve bajo el deslizar de los esquís...

...el frío intenso de la ladera helada...

...los crampones mordiendo, ante el vacío a los pies...

...esfuerzo y sonrisas...sonrisas de montaña...

dejamos de respirar: aire puro, olores que nos erizan el bello como el frío intenso mezclado con el humo de leña quemada; dejamos de pensar que las nieves de primavera estarían ahí, eternamente, como ese primer amor de la vida, dejamos de imaginar cómo sería esa esquiada perfecta o esa ascensión que tanta incertidumbre creaba en nuestro pensamiento...porque nuestro presente tenía la imperiosa necesidad de buscar un futuro inmediato de libertad...

...libertad buscando el vacío...

...escapando del presente...

...enchufados al futuro...

...SALTANDO la vida, como si no existiera otro día...

...como si el mundo se hubiera paralizado bajo los esquís...

...Lineas de vida que ascienden...buscando encontrar la libertad  en la cima  y el ensueño en su descenso...

una libertad a la que ahora llaman: LA NUEVA NORMALIDAD y a la que nos aferraremos como lo haríamos, cayendo por una pendiente mortal, a nuestro piolet salvador...

la NORMALIDAD  viene definida por la existencia de elementos normales o características habituales, corrientes. Si a la normalidad le ponemos el adjetivo NUEVO, simplemente la destruimos...pero sigamos engañados, o...anestesiados por el efecto narcótico del nuevo giro dado al sentido de LA NORMALIDAD. Quizás nuestros miedos se vean así imbuidos por una falsa protección, imperiosa para prosperar hacia  un futuro que nos resulta necesario si queremos sobrevivir a esta locura. O quizás así, esta NUEVA SITUACIÓN, obligada de enmascarar, tenga más apariencia de  lo normal. PERO NORMAL, DESDE LUEGO TODOS SABEMOS QUE NO LO ES.

...como este día en el que se caía, a cachitos,todo un corredor de hielo...

...o éste en el que en pleno invierno buscábamos la nieve...

......bajarnos de la nueva normalidad porque normal no lo es...

...confesarnos secretos normalmente confesables...

...huir de lo desconocido e invisible hacia la normalidad...

Envidiamos sanamente y nos alegramos de unos pocos privilegiados que en esta NUEVA NORMALIDAD y en alguna de sus intrincadas fases, todavía podrán deslizarse por blancas e inmaculadas laderas de nieve, mientras la mayoría de nosotros rebosamos alegría por poder salir a correr, montar en bici, o incluso, en un futuro no muy lejano, escalar paredes en nuestros rinconcicos; dando por extinguido este invierno efímero y sus nieves de primavera.

PRIVILEGIADOS...

Bienvenidos a la nueva normalidad o...la nueva situación vital o... quizás LA NUEVA LIBERTAD porque de momento eso es lo que realmente sentiremos: LIBERTAD.

...LIBERTAD...

ÁNIMO Y MUCHA FUERZA.